Un almacén semindustrial se ha transformado en un santuario para el cuidado personal que atrae la luz. Un centro de bienestar multifuncional para emular la calidad del estilo de vida australiano.
Para el diseño del espacio se han tenido en cuenta los cinco sentidos; textura, sonido, luz, así como aromas particulares de origen australiano. Cada espacio es distinto, pero perfectamente relacionados entre sí, siempre con un toque de eucalipto y cedro flotando en el aire, y una abundancia de luz natural.
En este espacio, el estudio Esoteriko Interior Architecture han tenido que combinar cuatro programas distintos, todos ellos bajo el lema de “bienestar”; baños de hielo, saunas, gimnasio y bar de juegos. Se ha proyectado un espacio con todos los lujos pero sin complicaciones, con una paleta de materiales moderada y cuidadosamente considerada.
Los materiales hacen del “almacén” y la terraza un espacio único. Una esencia de simplicidad premium. Los tonos rosados del cedro se equilibran delicadamente con los frescos reflejos de acero inoxidable y las baldosas blancas texturizadas. El pavimento de hormigón pulido gris unifica todos los espacios, con un telón de fondo de madera pintada en blanco, paredes en gris y reflejos de granito naranja texturizado y eucalipto.
Para integrar el programa de necesidades, como los vestuarios, se han definido los espacios mediante paneles en lugar de paredes, lo que proporciona una sensación de apertura manteniendo la privacidad necesaria.
Proyecto: Esoteriko Interior Architecture
Cliente: Shelter
Ubicación: Sydney
Fotografia: Tom Ferguson